Papaya

Prospera bien en una amplia gama de suelos, pero los más adecuados son los profundos y con buen drenaje. Puede tolerar ligeros fríos, pero no las heladas. Es esencial el calor para un buen desarrollo vegetativo y una producción satisfactoria de frutos con calidad comercial, la falta de calor merma la calidad de los éstos. Tolera bien los vientos moderados. Soporta la sequía, aunque la calidad de los frutos y la productividad decaen con un riego y abonado deficitario. Durante el primer año necesita aportes abundantes de nitrógeno.

En nuestro vivero producimos la papaya enana que se adapta muy bien a las zonas libres de heladas de la cuenca mediterránea. Por su reducida altura, inferior a dos metros, es adecuada para su cultivo bajo invernadero, al resguardo de los fríos, donde se puede lograr una mayor calidad de los frutos y mayor productividad.

Es una planta con mucho atractivo ornamental, cuya forma recuerda a las palmeras. Sus hojas son palmeadas, muy llamativas, de gran tamaño y con largos pecíolos. La papaya es adecuada como planta ornamental tanto de exterior como de interior. En el interior es preferiblemente criarla en un lugar soleado y ventilado.

Existen tres tipos de individuos en esta especie: hembras con flores femeninas, machos con flores masculinas y hermafroditas con flores de ambos sexos.

La papaya suele fructificar alrededor del primer año de su plantación. Se recomienda aclareo de flores y frutos deformes para obtener frutos de más elevada calidad.

La papaya produce un característico fruto alargado y globoso con la pulpa jugosa y dulce de un intenso color naranja cuando están maduros. En su interior hay una cavidad con muchas semillas de color oscuro. El tamaño de los frutos varía entre 300 gramos y unos pocos kilogramos según la variedad.

Es una fruta cada vez más demandada y consumida por sus propiedades saludables. En su punto óptimo de madurez, su pulpa es muy dulce y jugosa. La papaya tiene un alto contenido en vitaminas A y C, antioxidantes y papaína, la cual facilita la digestión. Es una fruta muy versátil con amplias posibilidades gastronómicas que se puede comer en fresco, cocinada, en conservas; elaborada en jugos, confituras y ensaladas. Cuando está verde se puede pelar la corteza y cocer en agua con azúcar y canela obteniéndose un postre. O bien madura, tal cual, en ensaladas o cortada en rodajas o dados, se adereza con azúcar morena y limón.

El látex que exudan los frutos verdes tiene una amplia aplicación en la industria farmacéutica y alimentaria por su elevado contenido en papaína.

Las plagas más importantes son ácaros, mosca de la fruta y nemátodos. También es una planta muy susceptible a las virosis.