¿Qué es?
La muerte regresiva es una enfermedad provocada por un conjunto de hongos patógenos aéreos de varios géneros (Neofusicoccum, Lasioplodia, etc.) que pertenecen a la familia Botryosphaeriaceae.
En los últimos 3 o 4 años se ha observado una alta incidencia de esta enfermedad en plantaciones comerciales de aguacate en el sur de España. No obstante, la muerte regresiva no es exclusiva de esta especie, afecta a prácticamente todas las especies de plantas leñosas que se han estudiado, y no se encuentra limitada únicamente a nuestro clima y zona geográfica. Diversos estudios demuestran que tiene una distribución mundial y que se puede encontrar en otros países como por ejemplo en el estado de California en EEUU o en Méjico.
¿Cómo aparece?
Los árboles se infectan con esporas (células producidas por el hongo para reproducirse) o fragmentos de micelio del hongo. Las esporas se encuentran tanto en el ambiente (en el aire) como en el terreno y en restos vegetales, sobre todo cuando se trata de fincas en las que ha habido o colindan con plantaciones de aguacates adultos infectados. Estas células son dispersadas por el viento, las lluvias, la intervención de insectos o con herramientas de poda. La penetración del hongo en la planta puede ser gracias a heridas o por vía directa a través de estomas, aberturas naturales que presentan las hojas de los árboles para realizar el intercambio gaseoso.
¿Qué le pasa a los árboles?
La enfermedad comienza por los extremos de las ramas, en los ápices, secando las panículas florales y las hojas terminales. La necrosis de las ramas (tejido ennegrecido y muerto) va avanzando de forma progresiva y en sentido descendente. Al mismo tiempo, en su interior, los haces vasculares toman un color rojizo que se intensifica conforme se profundiza en el tallo y que finalmente acaba necrosando también los tejidos más internos de la rama por completo. Por otro lado, se suelen producir chancros, heridas producidas por hongos en las que la corteza del árbol se encuentra ennegrecida y resquebrajada.
Éstos suelen aparecer sobre todo en las intersecciones de las ramas. En los casos mas severos van acompañados de un exudado blanco compuesto por azúcares internos de la planta y que al secarse se convierte en un polvo blanquecino. No obstante las plantas de aguacate pueden producir esta resina por otras causas y su presencia no implica la presencia de la enfermedad. Finalmente, el avance de las lesiones provoca que las ramas sufran una grave defoliación hasta que el árbol se seca y muere.
Es importante señalar que la enfermedad afecta más a árboles jóvenes. En las plantaciones ya establecidas de árboles adultos, aunque haya ramas que muestren síntomas de la muerte regresiva, normalmente no todo el árbol se ve afectado y suele seguir siendo productivo.
¿Cómo lucho contra la enfermedad?
Por el momento no existe ningún fungicida específico para el tratamiento de esta enfermedad. Ante esta situación lo primordial es aplicar medidas preventivas para evitar la infección y reducir las cantidades de inóculo, de esporas, existentes en el terreno y ambiente.
La susceptibilidad de los árboles aumenta enormemente cuando se encuentran expuestos a factores estresantes, sobre todo si presentan riegos deficientes o condiciones de encharcamiento, pero también ante deficiencias nutricionales, fuertes vientos, daños por heladas, heridas en el tronco al desbrozar las malas hierbas, salinidad en el suelo, plagas, o cualquier otro factor que los debilite. Al parecer, los árboles también son especialmente sensibles a su colonización en el momento de la floración.
Sin embargo, a pesar de que las esporas de estos hongos estén muy extendidas en el ambiente, son patógenos poco virulentos y no causan enfermedad siempre y cuando la planta se encuentre en buen estado vegetativo. Por ello es imprescindible realizar un buen manejo de las plantaciones manteniendo los árboles en excelentes condiciones hídricas y nutricionales.
Algunas medidas de carácter preventivo
- Mantener los árboles en buenas condiciones hídricas y nutricionales, evitando condiciones estresantes.
- Evitar producir heridas en los árboles a la hora de eliminar malas hierbas u en otras tareas.
- Sellar los grandes cortes como resultado de la poda con resinas específicas.
- Desinfectar con alcohol diluido en agua las herramientas de poda antes y después de cada árbol, sobre todo si éste presenta síntomas.
- Quemar los restos de poda de árboles enfermos para eliminar cualquier fuente de infección en el terreno.
En resumen
La muerte regresiva es una enfermedad producida por patógenos que se encuentra en el ambiente y que, aunque por el momento no se conoce un tratamiento específico correctivo, se puede prevenir llevando a cabo un buen manejo de las plantaciones especialmente cuando los árboles son jóvenes.